lunes, 23 de febrero de 2015

Dos micros, dos pecados

Un regalo inesperado


Jaime, con todo su dinero, era el más miserable de los tacaños. Si Jorge, el hermanito consentido de su mujer, esperaba un gran regalo con motivo de su boda, estaba muy equivocado. Aunque ello le costara el divorcio, le obsequiaría con ese par de gemelos que había comprado, a precio de saldo, para la ocasión.

Cuando Jorge abrió la cajita, no podía creer tamaña generosidad por parte de su cuñado: unas llaves de un coche y, por el logo del llavero, ¡un BMW!

Los ojos de Jaime se le salían de las órbitas.

En un rincón, su esposa se estremecía de gusto con solo pensar en la cara que pondría cuando viera el descalabro qué había sufrido su cuenta bancaria.
 
 
Un pecado capital
 

En catequesis me enseñaron los siete pecados capitales. No los recuerdo al completo pero sí sé que el peor de todos es la envidia, porque, según nos decía el padre Damián, el envidioso nunca es feliz.

A mí me envidia casi todo el mundo pero Pablo el que más. Nunca ha soportado mi éxito en los negocios. Me odia porque asegura que le robé el proyecto con el que me hice multimillonario. ¡Qué proyecto ni qué niño muerto! Una idea que se le ocurrió por pura casualidad, sin saber qué hacer con ella. No está hecha la miel para la boca del asno.

Y encima dice que el envidioso soy yo. Si así fuera, no podría ser tan feliz.

 
 
 
 
 
 
 


6 comentarios:

  1. Jajajajjaja muy divertidos tus micros, sobre todo el segundo!! Es original la idea de tratar sobre los pecados capitales en tono de humor, me ha gustado mucho.

    Un abrazo y buen día!!

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  2. A los buenos día, Julia. Me alegro que te haya hecho pasar un rato agradable, con café o sin café.
    Gracias por venir y dejar tu amable comentario.
    Un abrazo.

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  3. Divertidisimos. Mi favorito el de las llaves. Un saludo.

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    1. Hola Ratch Kendel. Bienvenida (si. como creo, eres mujer; y si no, pues bienvenido) a este rinconcito en el que vuelco lo que sale de mi imaginación. En justa correspondencia, me pasaré por el tuyo que parece muy interesante.
      Gracias por leerme y dejar tu comentario.

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  4. Jajaja, muy buenos y divertidos estos dos relatos. La mujer del tacaño se pasó tres pueblos, jajaja, ni tanto ni tan poco... y mira el otro que a gusto se quedó con la idea de su amigo.
    Me han gustado mucho Josep.
    Un abrazo.

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    1. Dos microrrelatos en clave de humor y con la tacañería y la envidia como telón de fondo. Me alegro que te lo haya hecho pasar bien. De eso se trataba.
      Un abrazo.

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