miércoles, 8 de abril de 2015

Enemigo eterno



Desde su atalaya, llevaba meses observando el resplandor rojizo que iluminaba las tinieblas como si un pavoroso incendio se extendiera hasta los confines de su Reino, el que había construido con la sangre y cadáveres de tantos inocentes.

Cuando por fin, cansado y decrépito, sin fuerzas para resistirse, se sintió atraído por el poder inconmensurable de aquella luz, tuvo que aceptar que había llegado el momento largo tiempo temido. Su poder en la tierra había tocado a su fin. Ahora saldría de dudas y conocería la identidad de aquel fulgor.

Al llegar al término del largo y tortuoso camino, vio que era Él, su eterno enemigo, que le conducía hacia el averno, allí donde había sido forjada su alma.
 
 
*Microrrelato publicado en "Pluma, tinta y papel". Diversidad Literaria, S.L: 2015.
Para más información, véase la entrada "El negocio de algunos concursos literarios" en mi blog "Cuaderno de bitácora", del 19 de marzo de 2015.
 
 

6 comentarios:

  1. Y es que no hay mejor reflejo que el que te proporciona el alma, para bien o para mal según las acciones hechas a lo largo del camino de la vida, y no hay mayor enemigo que uno mismo cuando la mente no está limpia.
    Hola Josep, ya leí en su día la entrada que nos apuntas... El tuyo, un buen relato que bien podía haber sido premiado de otra forma.
    Un gusto volver por aquí.
    Te dejo un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Somos lo que nuestra conciencia o nuestra alma nos convierte. Somos tal como que nuestros actos nos definen.
      Muchas gracias, Elda. Siempre es un gusto verte por aquí.
      Un abrazo.

      Eliminar
  2. Un texto corto pero lleno de fuerza.

    Todos volvemos a nuestros orígenes a la hora de la verdad, y tu protagonista no tuvo más remedio que rendir cuentas en el mismísimo infierno... Muy bueno!!

    Un abrazo, Josep.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Quiero creer que todo el mundo acaba encontrando su merecido en esta vida.
      Muchas gracias, Julia, por tu amable comentario.
      Un abrazo.

      Eliminar
  3. Nuestro mayor enemigo somos nosotros mismos y nuestro pensamiento. Muy buen relato Josep. Feliz fin de semana!!!
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Somos el resultado de nuestros instintos y nuestras obras y deberemos pasar cuentas de ello, aquí o allá.
      Muchas gracias, Skuld, por tu comentario.
      Un abrazo.

      Eliminar