Cien días es el término tras el cual suele hacerse una valoración de lo realizado y conseguido por un gobierno tras iniciar su legislatura. No es un periodo de tiempo muy largo, pero suficiente para comprobar si se están cumpliendo las expectativas en las que se basó la campaña electoral.
Del mismo modo, pues, he dejado transcurrir este mismo periodo para hacer un balance de la andadura de mi bien amado libro “Irreal como la vida misma”. ¡Qué cansino!, diréis alguno/as. Otra vez con el dichoso librito. Si ya parece Francisco Umbral, quien puso en un brete a Mercedes Milá en Antena 3TV, allá por los años 90, con su obcecación y grosero comportamiento porque en el programa no se hablaba de su libro, motivo por el cual había aceptado asistir.
Pero no temáis, no voy a quejarme ni a lloriquear cual plañidera. Ese sería el recurso fácil para dar pena. Hay quien usa el victimismo para lograr sus propósitos que, en este caso sería conseguir más ventas. No, no es ese el objetivo de este post, aunque pueda parecerlo. Mi campaña electoral, o propagandística, concluyó con un recordatorio en Facebook, el siete de febrero pasado.
Por lo tanto, estas líneas no son más que un epílogo, el examen final de un ejercicio de meses. Como perfeccionista que soy, me gusta evaluar todo lo que hago. Y como, además, he compartido con vosotros/as la aventurada aventura de auto-publicar esta recopilación de relatos, bien os merecéis que os ponga al corriente de cómo me ha ido. Además, quién sabe si mi experiencia puede servir de revulsivo, consuelo o de ejemplo de lo que no hay que hacer, para aquello/as que se hallen en idéntica tesitura.
En cuanto a este último aspecto, Jaume Vicent, en su blog Excentrya, dedicado a instruir al escritor novel en esta ardua tarea de escribir, editar y “vender” su obra, acaba de publicar un post titulado “¿Quién quiere leer mi libro?” Aunque no mencione mi nombre, me reconozco claramente en su párrafo introductorio. Según él, mi error fue no haber sabido elegir mi público, mi target. Recomiendo, pues, la lectura de su artículo, a todo aquel que se haga esa misma pregunta.
Al margen de los argumentos que Jaume Vicent esgrime, y que sin duda comparto, debo reconocer que fui muy ─demasiado, diría yo─ optimista a la hora de estimar las posibles ventas de mi libro. Por lo visto, soy un pésimo analista de mercados.
Pues bien, el caso es que, al cabo de cien días de tener el libro a la venta, las ventas han sido mucho más modestas y desalentadoras de lo que esperaba. Llegado a este punto, aprovecho para expresar mi más sincera gratitud a todo/as aquello/as que confiaron en mí y en mi libro y se arriesgaron a comprarlo, a quienes tuvieron, además, el detalle de dejar un comentario en el apartado correspondiente de la web de Amazon y, de un modo especial, a David Rubio, compañero de letras y autor del blog “Relatos en su tinta”, quien el pasado domingo publicó una estupenda reseña de mi libro (por lo magníficamente bien elaborada y por los elogios recibidos), que me ha dejado con una sonrisa bobalicona de pura satisfacción.
En otro orden de cosas, de índole práctica, he podido comprobar la todavía poca costumbre o habilidad que existe para realizar compras online. Han sido varias las personas que, por desconocimiento o falta de práctica, me han pedido que comprara yo el libro en su lugar. Posiblemente, algunas otras habrán desistido de la compra por estos motivos. Ese es, a mi juicio, el único aspecto negativo que tiene publicar en Amazon y no en una editorial convencional. La parte positiva es que la inversión económica es muy baja, de modo que el riesgo de pérdidas económicas es también muy bajo, pudiendo recuperar fácilmente lo invertido. Por contra, una editorial que trabaja con la autoedición parte de una tirada mínima de unos pocos cientos de ejemplares, siendo la inversión muchísimo mayor y solo recuperable si se logra un mínimo de ventas. Son, por lo tanto, dos opciones que deben valorarse detenidamente antes de inclinarse por una de ellas.
Y hasta aquí la valoración del funcionamiento del libro, porque en lo que respecta a este blog, el medio de cultivo y origen del recopilatorio de relatos, solo tengo palabras de agradecimiento. Desde que nació, hace casi cuatro años, me ha dado muchas satisfacciones: me ha llenado vacíos existenciales, me ha ocupado gran parte de mi tiempo libre, me ha ofrecido un espacio donde volcar el fruto de mi imaginación, y ha sido un medio que ha propiciado el encuentro con compañero/as que son un verdadero estímulo para seguir haciendo lo que hago. Con el tiempo, algunos me han abandonado, muchos otros han venido a ocupar su lugar, y otros han estado ahí desde los comienzos, fieles seguidor/as. A todos, muchas gracias por vuestra presencia y vuestro afecto.
Si “Irreal como la vida misma” no ha funcionado como esperaba solo es culpa mía, que no he podido o sabido hacerlo mejor. Pero del mismo modo que Rick Blaine (Humphrey Bogart) dijo a IIsa Lund (Ingrid Bergman), en Casablanca, aquello de que “siempre nos quedará París”, a mí siempre me quedan los “Retales de una vida”.
Pero esto no es un epitafio. El libro no ha muerto. Ahí sigue, esperando, atento. Quizá intente aprender y practicar nuevas vías de promoción. A ver si, de este modo, resucita. A fin de cuentas, 100 días no son nada.
Ay amigo, esto de vender por Internet es difícil, no ya por hacer la compra, sino por que el porte aumenta el coste de cualquier artículo, y siempre se espera a ver si hace falta algo más para pedirlo a la vez, y que salga mejor la compra.
ResponderEliminarA mi hija le va fatal con las "chanclas", a vendido más de boca a boca y en mano, menos mal que esto es aparte de su trabajo de siempre.
Con el tiempo seguro que venderás más, al fin y al cabo como tu dices, cien días no es nada.
Un abrazo.
Hola Elda. Si vender, en general, ya es difícil, hacerlo por Internet lo es más, a pesar de que, poco a poco, este sistema se va imponiendo. Hay quien lo compra casi todo por esta vía. Yo reconozco que según qué cosas a la gente le da reparo comprar online, sobre todo comida, ropa y zapatos, pues lo eligen sin poderlo palpar y comprobar su calidad y una vez en casa vienen las decepciones, y cambiarlo implica una serie de molestias, pero un libro, un CD de música o un DVD de una película, por ejemplo, no tienen porqué generar ningún problema.
EliminarEl caso de tu hija quizá se deba a lo que menciono, que la gente no se atreve a comprar sus chanclas porque teme encontrarse con que no son cómo se las imaginaba viendo las fotografías y como no se las puede probar... Menos mal que que tiene otra fuente de ingresos, que si no...
Muchas gracias por tu halagüeño comentario. De todos modos, yo ya me doy por satisfecho con que alguien haya respondido a mi reclamo, jeje
Un abrazo.
Hola Jose Mª acabo de leer la estupenda reseña de David Rubio, un precioso regalo. Enhorabuena por haberte embarcado y "parido" este trabajo que sin duda debe ser estupendo. Te cuento que ya lo pedí, nuevecito, y lo tendré la próxima semana en casa, la pena que no puedas firmarlo, es broma jeje. Esto por un lado, y ahora esos cien días compañero no son nada. Los libros nos dan sorpresas, siií, ellos solitos. Yo solo parí uno, que me costó la misma vida (otra perfeccionista) este lleva texto y fotografías y con la editorial para que no me colocaran las fotos al revés y que cada una fuera con su descripción ni te cuento, que tarea, creía que nunca iba a terminar, pero se presentó y fue muy emocionante, derechos de autora, no porque era un proyecto de la Universidad. Si te cuento que lo he llevado conmigo cuando creí que era necesario dejarlo en un sitio, alguien lo leería y se entusiasmaría con él. Una vez me encontré en un lugar de lo más insospechado, una farmacia y su farmaceútico me dijo tú eres Emerencia, si la del libro de plantas, no sabes lo que me emocioné. Alguien siempre lo leerá, quedará en una biblioteca cuando ya no estemos porque la palabra vuela, vuela como el aire y ondea sobre las olas de los tiempos así que considérate dichoso ya solo por haberlo escrito. Llévalo siempre contigo y déjalo donde vayas, país, ciudad. Tu palabra quedará. El éxito de la venta depende mucho de las editoriales, como tu bien dices y eso, amigo, si que es una inversión. SI te vienen los nombres de los compradores mi compra aparecerá como Francisco Jose Baena, mi pareja, es el que suele comprar en Amazon. Por cierto, una sugerencia, es que lo pongas en tus blogs con un enlace a Amazon. Estoy segura que la gente quiere saber como adquirirlo, me refiero a la gente que te sigue, los nuevos, viejos y los futuros. Un abrazo
ResponderEliminarPues la verdad es que la reseña de David ha sido lo mejor que me ha ocurrido con el libro. Ha sido un gran regalo, especialmente viniendo de él, que escribe de maravilla. A mí no se me da muy bien hacer reseñas (no sé porqué será) pero, en justa contraprestación y sin ánimos de "hacerle la pelota", te diré y digo a todos los que lean este comentario que, si os gusta la ciencia-ficción, su libro "Los demonios exteriores" es una magnífica novela de este género literario, muy bien narrada y con una gran derroche de imaginación. Es por ello que su valoración tan positiva de mi recopilatorio me resulta tan gratificante.
EliminarParir un libro no produce un dolor físico pero sí anímico. El esfuerzo que entraña su elaboración, revisión y la ansiedad posterior por comprobar el resultado, es algo que solo conoce quien ha pasado por ello.
Te agradezco mucho tus comentarios e ideas, son para tenerlas muy en cuenta. Y te agradezco, cómo no, la deferencia de haber adquirido un ejemplar. De hecho, me estaba preguntando ¿quién habrá sido?, jajaja, pues el nombre del comprador no aparece, solo figura (y no siempre, no sé porqué) el nombre de quien deja un comentario al terminar la lectura.
MI hija menor, que escribe poesía en su blog, fue sembrando nuestra localidad y algún barrio de Barcelona capital de pequeños tarjetones o fichas de cartón con pequeños fragmentos de sus poemas, añadiendo al final la dirección electrónica de su blog para que quienes hubieran apreciado y gustado de su poesía, pudieran visitarlo. Para mí fue una idea magnífica, pero no obtuvo más visitas de las que suele tener, que son más bien escasas. Ahora está pensando seguir mis pasos y auto-publicarse y yo la animo, sea cual sea el resultado.
Un fuerte abrazo.
P.D.- Una curiosidad: si dijiste hace poco que eras de ciencias y editaste un libro sobre plantas, ¿acaso tu especialidad es la fitoterapia?
Me alegra que te gustara, te aseguro que a mi me gustó mucho más tu libro. En cuanto al tema de las ventas, dediqué una entrada hace un par de meses en mi blog. No es que el autor autopublicado venda poco, es que se venden muy pocos libros aunque sean de las editoriales. De hecho es esa falta de ventas lo que, pienso, ha propiciado que portales como Amazon promocionen y faciliten la posibilidad de autopublicar. De esa manera se aseguran que los pequeños grupos de compradores de cada autor novel, compren. Fíjate que pienso que Amazon gana más con los autopublicados que con los otros. ¡Un fuerte abrazo y a por el segundo!
ResponderEliminarNo solo me gustó, David, sino que me satisfizo enormemente. A mí y a mi ego, que andaba un poco alicaído jeje. Y, como en todos los obsequios que uno recibe, la sorpresa, lo inesperado, le dio un valor añadido. Como ya he dicho, además de lo bien escrito y detallado (se nota que tienes una aptitud especial para este tipo de ejercicios), te lo trabajaste de lo lindo, incluyendo (cosa que es muy de agradecer), los vínculos a mi blog, a mi entrevista y al libro en la web de Amazon. Podrías ser mi agente literario, jajaja.
EliminarEn cuanto a lo que comentas de Amazon y su apuesta por la autopublicación, leí hace unos días que la editorial PLaneta, por mediación de una asociación de escritores, si mal no recuerdo, había creado una editorial que competiría con Amazon en ese mismo campo.
Y, por cierto, estoy totalmente de acuerdo contigo en que sería una excelente idea que hubieran revistas dedicadas a publicar relatos e incluso añadiría que los periódicos podrían incluir alguna sección dedicada a ello. Muchos fueron los escritores que iniciaron su carrera literaria de este modo. Jame Joyce fue uno de ellos, escribiendo novelas por entregas. Y creo recordar que mi amigo Stephen también.
Un fuerte abrazo!
En esta vida no puede hacerse todo bien, y como lo de escribir ya se te da mucho mejor que bien, quizás en la promoción no podías brillar con igual esplendor. Qué puedo decir, querido compañero, excepto que siento que no haya salido todo exactamente como esperabas. Pero como bien dices la parte difícil ya está hecha, el libro sigue ahí y es bueno; quizás solo sea cuestión de leer algunos tutoriales sobre cómo promocionarlo y ponerse manos a la obra. Lo último es el desaliento.
ResponderEliminarAhora que nadie lee confesaré que si alguna vez se me ha pasado por la cabeza la idea de intentar publicar algo, la he desechado de inmediato ante la ardua tarea que supone todo ese trabajo que tú has realizado. Ya ves, yo me he dado por vencida antes de empezar. Tú tienes mucho por lo que sentirte orgulloso :))
¡Un abrazo!
Efectivamente, no podemos destacar en todo, jajaja, en algo tenemos que fallar, porque una cosa es ser perfeccionista y otra muy distinta perfecto. Y yo ni lo soy ni lo quiero ser. Los hombres (y mujeres) perfectos deben ser insoportables.
EliminarRecuerdo que cuando hablé por primera vez del libro que iba a publicar y anuncié que esperaba no hacerme pesado promocionándolo, me dijiste que tenía todo el derecho a hacerme pesado pues para eso era mi libro. Pues mira, no sé si lo he sido o no, pues en Facebook publiqué unos cuantos recordatorios, pero quizá tengas razón y exploraré nuevos horizontes "marketinianos" o de "mercadeo", como dicen en Sudamérica. En efecto, el trabajo más difícil ya está hecho y el libro está ahí, solo hace falta saber atraer a nuevos lectores.
Pues, entre tú y yo, creo de veras que tu libro, recopilatorio, o novela, tendría muchas posibilidades porque, sin afán de darte coba, escribes de maravilla y tus historias tiene mucho gancho. Así que anímate.
Muchas gracias, Julia, por tus palabras de elogio y ánimo.
Un fuerte abrazo.
Ya lo siento, Josep. Hay que decir que Amazon no publicita los libros, así que en realidad has dependido de la publicidad que le hayas hecho tú mismo. Espero que no te desanimes y que sigas escribiendo, ya que buenas ideas no te faltan. ¿Me pasas el link del post en el que hablabas de tu libro? Porque supongo que escribirías un post para anunciarlo, ¿no?
ResponderEliminarMuchas gracias, Holden.
EliminarCiertamente, Amazon es una plataforma excelente para publicar pero, una vez cumplido este objetivo, la promoción corre a cuenta del autor. A lo sumo, puedes hallar algún consejo para atraer compradores, como por ejemplo ofrecer tu libro gratis durante un tiempo o con un descuento importante, pero nada más.
En realidad escribí dos post, el primero anticipando la publicación del libro y el otro anunciando el "lanzamiento". Aquí te adjunto el link de este último:
http://jmretalesdeunavida.blogspot.com.es/2016/12/el-proyecto-llego-su-fin-el-libro.html
Un abrazo.
¡¡¡¡Hola!!!!!
ResponderEliminarAyyyy es que en esto de la autopublicación lo peor es la publicidad y la distribución.
Yo sé que a mí me faltaría poder de convocatoria, y me sobraría vergüenza para promocionarme, por eso no me lanzo.
Te deseo muchísima suerte porque te la mereces, sé que es difícil esta parte pero bueno, tú puedes, así que a promocionar tu criatura por todas partes.
Ahhhh, y haces genial en animar a tu hija a autopublicarse salga como salga, no sabía que tenía un blog de poesía.
Un abrazo.
Pues yo no es que sea un lince promocionándome pero no queda más remedio si quieres vender ejemplares. La cuestión es saber cómo hacerlo sin morir en el intento o matar de aburrimiento al prójimo, jaja.
EliminarA mi hija también le da un poco de "corte" pero, por lo menos ya seremos dos los sufridores,
Un abrazo.
Muchas gracias por tus deseos.
La verdad es que siempre es un reto publicar algo, y fíjate que ya no entro en si escoger un público u otro te asegura más ventas, porque al final todo depende de muchas cosas, sino que el propio formato de publicación a escoger ya es para pensárselo, todo tiene su lado bueno y malo.
ResponderEliminarAl final, de lo que se trata, es de que hayas disfrutado durante el proceso y con el resultado final, al menos eso me está pasando a mi con el cómic. Sí que has de intentar analizar qué vías de promoción puedes usar en adelante, tanto para este como para otro que puedas publicar posteriormente. Aunque de forma esporádica, hago reseñas en una web, si puedo hacer algo por ti escríbeme ;)
Lo de las revistas es una pena, precisamente como decías King empezó así, escribiendo en revistas que le pagaban por mandarle material. Aquí y en el presente todo eso nos parece ciencia ficción la verdad, y es una lástima.
En cualquier caso, 100 días no son nada, míralos como un motivo para cambiar en los 100 próximos el modo de enfocar el asunto, repuntando lo bien hecho y puliendo lo que crees que hicieras peor. ¡Un abrazo y ánimo!
Hola José Carlos!
EliminarMuchas cábalas hice sobre cómo y dónde publicar y acabé, para bien o para mal, con la opción de auto-publicar en Amazon. Recibí cantos de sirena de una editorial, cuyo nombre no mencionaré, que me brindaba una generosísima oferta, haciéndome el favor de ir en coedición, cuyas condiciones económicas inmejorables pasaban por comprarles la mitad de los 500 ejemplares de la primera tirada, es decir la parte que me correspondía de la tarta, al precio de venta al público, que ellos habían fijado en 18 euros. De ese modo, se embolsaban de la noche a la mañana 4.500 euros, que aseguraban podría recuperar ipso facto. El resto de editoriales "serias", o bien no se dignaron a contestar o bien argumentaban lo de siempre: que no aceptaban más manuscritos, que solo aceptaban manuscritos solicitados por ellos (?), que en su línea editorial no se incluían los relatos... En una editorial bastante conocida, que ya me había dado este último argumento con mi primer libro, me anticipé y les envié mi segundo manuscrito mencionando el hecho (previamente confirmado) de que tenían una serie dedicada a los relatos. Como no pudieron esgrimir nuevamente esa excusa, se limitaron a decirme que no publicaban relatos de autores desconocidos.
En fin, te cuento todo este "rollo" como desahogo, pues ya debes saber por experiencia propia de qué va el tema. Así que, tienes toda la razón, lo importante es que haya disfrutado del proceso aunque el resultado final no haya sido el esperado. Pero, como le he dicho a una compañera de letras por otro conducto, debo ver el vaso medio lleno y no medio vacío.
De momento he recibido el generoso apoyo de David Rubio, quien, en su blog "Relatos en su tinta", tuvo a bien publicar una reseña de mi libro. Realmente, es este un camino tan difícil que hay que agudizar mucho el ingenio para darse a conocer. El actual finalista del premio Planeta, Marcos Chicot, tuvo un éxito de ventas tremendo publicando en Amazon su anterior novela "El asesinato de Pitágoras". Al margen de la calidad de esta obra, algo especial tuvo que hacer para que aquellos que no le conocían le compraran el libro hasta llegar a ser record de ventas.
Sí, amigo, me daré un periodo de reflexión y tomaré debida nota de los consejos de aquellos que en esto saben mucho más que yo. Muchas gracias por tu interés.
Un abrazo.
Nunca desesperes ni pienses que la falta de ventas es problema tuyo. Tu eres el creador que ha sido capaz de escribir un libro ¡Ni más ni menos! No todo el mundo es capaz de hacerlo ni de plantar un árbol ni de tener un hijo y no por ello son menos hombres.
ResponderEliminarEl caso es que cada vez se lee menos en este país donde nos importa más el fútbol y los cotilleos de los famosos, que la cultura que nos eleva a otro nivel.
Por tanto, si tu has escrito para hacerte rico o ver como tu creación literaria alcanzaba los superventas, has errado de parte a parte. La satisfacción de haber podido editar un libro ya es de por si un gran premio a tu esfuerzo.
Por otro lado Chicot y otros como él, han llegado a conseguir grandes ventas con una promoción muy estudiada y una presentación de sus libros en foros, casas de cultura, librerías etc, con el esfuerzo personal y la inversión en tiempo que ello conlleva y partiendo con el apoyo de contactos relevantes de los que la mayoría de mortales carecemos.
¡En fin! no se si te servirá de consuelo. yo tengo dos libros preparados y un tercero en cuajándose como la tortilla y no pienso editarlos aunque si imprimirlos en papel. Yo mismo los compraré y los iré vendiendo si llega el caso a las amistades y familiares interesados. Con tal de cubrir los gasto me valdría, esperar más es de ingenuos.
Un abrazo y ánimo sobre todas las cosas. Escribes bien y lo sabes.
Desde luego, Francisco, no estuvo jamás en mi mente la posibilidad de triunfar convirtiendo mi libro en un best seller. Tampoco me movió el dinero. Hubiera sido demasiado ingenuo por mi parte. Ya fue todo un reto que me aventurara a publicarlo, yo, que siempre he sentido pavor por el fracaso y el ridículo. En alguna ocasión he dicho que me movió la ilusión de ver plasmados en un libro mis relatos y, de paso, ponerlo a disposición del público (esta segunda parte es la que más temor me infundía). Incluso el ego de la persona más modesta e insegura pide alimentarse y es cuando nace ese deseo de que el fruto de tu ilusión y esfuerzo se vea recompensado con una buena aceptación por parte del público, evidenciándose ésta en forma de ventas.
ResponderEliminarSería algo parecido a cuando haces un regalo, que no lo haces para que te lo agradezcan, pero si no lo hacen te sientes defraudado porque lo has hecho con ilusión, esperando que guste.
Pero corramos un tupido velo. Volviendo a la cruda realidad del escritor novel, esto es lo que suele ocurrir, a menos que, como bien dices, le arrope una campaña de marketing que él mismo tiene que encabezar, buscando oportunidades en distintos foros y círculos, cosa que yo no he hecho. La oportunidad no viene a buscarte, tienes que ser tú quien vaya a por ella. Así que, en cierta medida, sí creo que soy responsable de la falta de ventas.
Eso si, por lo menos, con la última venta he recuperado lo invertido, jeje
Anímate, pues, que con tu elocuente y afilada puma, seguro que tus libros tendrían mucha aceptación.
Muchas gracias por tus palabras.
Un abrazo.
Al menos publicaste y cumpliste una ilusión y un sueño, la verdad pienso que es complicado, pero quedate siempre con todo lo positivo que has sacado de ello que seguro que algo habrá, que se han vendido menos de lo que esperabas? si, pero al menos han podido llegar tus letras a alguien y eso es muy importante, de modo que no es del todo un fracaso si no lo hubieras hecho nadie estaría quizás en este momento leyendo tus letras, y eso al fin de al cabo es lo importante, para quienes escribimos uno de los objetivos es llegar a los demás y ese objetivo lo has cumplido, y además hay calidad, y yo siempre digo que la calidad es lo importante, la cantidad lo de menos, de modo que objetivo en cierta medida cumplido. un abrazo y no te desanimes y eso si sigue escribiendo. TERE.
ResponderEliminarPues sí, Tere, por lo menos llegué a publicarlo. Algo es algo. Y tienes razón en cuanto a que lo importante es que haya a quién le guste lo que escribo, aquí, en el blog, o en un libro publicado.
EliminarNo me arrepiento en absoluto de haberlo hecho, a pesar de que el resultado no haya sido el esperado. Muchas gracias por tus elogios y tus ánimos. Por supuesto que seguiré escribiendo, contra viento y marea. Mientras tenga algún/a lector/a a quien le guste lo que hago, seguiré aquí, al pie del cañón, jeje
Un abrazo.
Amigo eso es lo difícil de poder vender, cuando no eres conocido. Yo en lo que se refiere amis pinturas he ido haciendo exposiciones y sólo en la primera pude vender 10 cuadros que para mi fue un éxito. Famosa no me hice, ni me haré y hoy en día el arte está muy poco valorado si no haces nombre. Lo mismo pasa con los escritores nóveles, que aparte de editar un libro hay que hacer propaganda y publicidad y aun a pesar de todo será difícil vender. Mi hijo está tras mi novela y me la va a publicar en Amazon. Y estoy atacada de los nervios porque no sé si resultará bien, gustará o no. Pero nunca hay que perder la ilusión por lo que uno hace o escribe, si te gusta lo que haces. Pues yo compré tu libro y estoy leyendo cada noche un poco y me está gustando. A la vez compré por Amazon varios libros para regalar y entre ellos unos de relatos también. En él está un relato mío que fue clasificado. Las ganancias de las ventas las lleva la editorial, pero por lo menos me siento orgullosa de formar parte de un libro que desconozco cuantas ventas y ganancias han hecho del libro. El tuyo me gusta, tengo pena de no haberlo comprado a tí y poder tenerlo dedicado. Pero si alguna vez puedo conocerte quizás me lo puedas firmar. Tengo un amigo escritor que los vende él y todos los que le compro vienen dedicados. Un abrazo
ResponderEliminarSí, María del Carmen, el mundo del arte en general es muy complicado y hacerte un lugar entre tanto talento que hay por ahí resulta casi imposible. A menos que tengas la ayuda de alguien o de una entidad que te promocione. Pero es que a mí no se me da muy bien eso de la auto-promoción y mis contactos son escasos, si no nulos.
EliminarY los de vender mi libro a mano y dedicado, solo lo he podido hacer con las personas de mi entorno, que viven en mi población o en Barcelona. Claro que hubiera haber podido comprar un montón de libros para tenerlos en stock (Amazon ofrece esta posibilidad) y enviarlos firmados a quienes me lo fueran pidiendo pero ¿cuántos ejemplares hubiera podido comprar, 10, 20, 40, 100? No tenía ni idea que cuántas personas estarían interesadas en comprarlo.
Yo también sé de personas que han escrito un libro y lo van vendiendo en persona pero eso de ir detrás de la gente ofreciendo el libro no me acaba de gustar.
Si algún día hiciéramos un encuentro de compañeros blogueros, seguro que te formo el ejemplar, :)
Un abrazo y te agradezco que sea una de mis lectoras.