Quería cambiar de vida, pero no parecía tarea fácil. “Naciste pobre y pobre morirás”, me dijo un amigo en la mili tanto o más pobre que yo. De eso hace veinte años. Al licenciarme, volví al pueblo para seguir ayudando a mis padres en las tareas del campo y en el cuidado del ganado. Ni el campo ni el ganado eran nuestros. No teníamos más que un humilde jornal y un techo donde cobijarnos. ¿Qué otra cosa podía hacer? Sin apenas estudios, muy pocas, sino nulas, eran las posibilidades de prosperar.
Cuando por fin abandoné el pueblo y mi familia, todos me desearon suerte. “La vas a necesitar, hijo” ─me dijo mi padre─. “Ve con cuidado y no andes con malas compañías” ─apostilló mi madre.
Acabo de cumplir los cuarenta y soy muy rico. Parecía imposible, pero lo he logrado. No ha resultado fácil y he debido pagar algún peaje a cambio. Ahora soy la envidia de muchos. Mis padres, ya viejos, se enorgullecen de mí. Yo les cuento lo que quieren oír. Y ellos me creen.
Seguí los consejos de mi madre solo a medias. He ido siempre con tiento, pero no sé qué pensaría si supiera quiénes me rodean.
Con este relato, participé en la VI edición del concurso de microrrelatos "Microconcurso La Microbiblioteca" organizado por la Biblioteca Pública Municipal Esteve Paluzie del Ayuntamiento de Barberà del Vallès (Barcelona), en su convocatoria del mes de febrero.
Ayyyy es que ser pobre es muy duro, así que entiendo que pagara el peaje y aceptara las malas compañías.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho, suerte en el concurso si es que no se ha fallado aún. Ayyyy leyendo estas cosas me entra el gusanillo de retomar los concursos pero ando tan mal de tiempo...
Un abrazo.
Dicen que el hambre agudiza el ingenio y muchos, para salir de la miseria, tienen que buscarse la vida como sea. Lo malo es cuando ese "como sea" incluye los bajos fondos o los altos ambientes delictivos.
EliminarPues sí, Gemma, el concurso ya se falló y mi relato también falló, jaja. Se trata de un certamen que selecciona el relato ganador de cada mes y al cabo del año, todos los ganadores mensuales participan en una final y en ella se entrega el premio "gordo". Así pues, podría seguir participando presentando un nuevo microrrelato cada mes y, de salir premiado alguno de ellos, pasaría a la final. Pero después de ver el que ha resultado ganador de este mes de febrero, veo que tendría que subir mucho la calidad del mío, pues hay que ver el nivelazo. Y es que hay muy buenos escritores por ahí.
O yo tengo mala suerte con los concursos o insuficiente calidad, pues de los 25 a los que me he presentado hasta ahora solo gané un accésit el año pasado. En lo que va de año, me he presentado a 6 y de momento ya he quedado descalificado de 3. Veremos si alguno de los restantes me trae más suerte, jeje.
Un abrazo.
Lo de los concursos es muy relativo, yo creo que escribes muy bien pero hay muchos factores más allá de la calidad.
EliminarYo antes participaba bastante y he a veces tenido suerte y he ganado también bastantes, y en muchos he quedado descalificada, claro, pero he visto cada tongo que es ver para creer, así que me he vuelto desconfiada.
Si vuelvo a los concursos huiré de los que proponen editoriales, y los que tienen comité de selección tampoco me gustan porque el criterio para elegir los relatos que llegan a manos del jurado propiamente dicho suele ser bastante malo, los mejores suelen ser los de Ayuntamientos, aunque he visto también cosas que...en uno una vez ganó la propia concejala de cultura, pero lo malo es que al poner el relato en Internet vimos que era horrible, mal escrito, se cargaba la sorpresa en el primer párrafo...evidentemente en el fallo no ponían que era la concejala pero alguien se enteró y lo divulgó. Yo en ese no había participado, y menos mal, porque tengo muy buen perder pero que se rían de mí me fastidia mucho.
Y otras veces leo que en un concurso han participado 400 relatos y el fallo es una semana después, pues a mí me dijo una vez un señor del jurado que no los leen todos, así que si el tuyo llega en un mal momento y ya han elegido ganador entre los 50 o 100 que han leído ni lo miran.
Un abrazo y te animo a seguir participando, tienes calidad y el resto a veces es cuestión de suerte, sin más.
Muchas gracias, Gemma, por los ánimos que me das. Espero tener más éxito en futuras convocatorias, por lo menos para que mi autoestima no quede muy maltrecha, jaja
EliminarUn abrazo.
Parece que no fue muy correcta la forma de hacerse rico, y tampoco que sea feliz del todo por tener que ocultar la verdad, y es que el dinero no lo es todo.
ResponderEliminarUn relato estupendo que seguro tendrá éxito.
Me gustó mucho Josep.
Un abrazo.
Pues la verdad es que no, Elda. Supongo que esas malas compañías de las que le previno su madre hicieron mella en él. Se hizo rico haciendo vete a saber qué, aparcando los escrúpulos y los consejos, pero yo tampoco creo que llevar una doble vida le permita ser feliz.
EliminarGracias por tus buenos deseos, pero como ya le he dicho a Gemma, el concurso ya ha elegido el microrrelato ganador del mes, así que, a menos que siga concursando, ya no podré pasar a la final. Y como también he comentado, he visto (por el relato ganador de este mes) que el nivel es muy alto. Así que, si me decido a presentar alguna más a lo largo de este año, tendré que afilar mucho más el lapicero, jaja
Un abrazo.
Parece que todo en esta vida tiene un precio y no siempre se paga con dinero...
ResponderEliminarUn relato corto con muchísimo trasfondo, Josep. Creo que has dado las pistas justas para nos ambientemos y comprendamos a la perfección lo que subyace más allá de la evidencia. Solías escribir relatos más largos, pero los micros también se te dan muy bien. Este es francamente bueno a mi parecer :)
¡Un abrazo!
Todo lo que hacemos en esta vida tiene un precio y también unas consecuencias. Así que allá cada uno con su conciencia. Presumo que la de este personaje no debe estar muy tranquila, pero quién sabe. Cuando se alcanza un estatus económicamente muy elevado por medios inconfesables, la conciencia pasa a menudo a un segundo (o tercer) plano.
EliminarEfectivamente, "lo mío" son los relatos un poco más largos. Los microrrelatos no son mi especialidad, por decirlo de algún modo. Es un género, a mi entender, muy difícil pues, como bien dices, en pocas palabras hay que concentrar mucho una historia y dejar entrever mucho más de lo que se dice sobre el papel.
Muchas gracias, Julia, por tu amable comentario.
Un abrazo.
Es un relato muy bueno, no entiendo como te han descalificado, en fin, pero tú no decaigas y sigues presentándote, no te desanimes, quien sabe quizás en un uno de esos intentos. Yo no lo he hecho nunca pero debería planteármelo, en fin igual algún día me decido, quien sabe.
ResponderEliminarLa verdad aún con malas compañías tuvo suerte, pero no hay que tentarla mucho y yo que quieres que te diga la avaricia y el dinero son a veces malas, de modo que si que se es pobre pero también es cierto que es un riesgo muy caro, y más cuando hay malas compañías por medio, en fin, es mi opinión. Y si tenia un techo y un humilde trabajo para que se quiere mas, a costa de poner en riesgo tú vida y no se cuantas cosas más, en fin pero tú protagonista tuvo mucha suerte.
Un abrazo, y te ánimo a que sigas escribiendo y por lo tanto a presentarte algún concurso. TERE.
Muchas gracias, Tere, pero es lo que hay. Cuando me sienta con nuevos ánimos volveré a intentarlo. De momento, tengo varios concursos por delante esperando el veredicto desde mayo hasta finales de año. Veremos qué tal se me dan. Esto de los concursos es como declararse a una chica que no sabes si le gustas. El no ya lo tienes, hay que ir a por el sí, jeje
EliminarMi querido protagonista tuvo suerte si tenemos en cuenta que consiguió salir de la pobreza, lo cual ya fue una proeza (vaya juego de palabras), pero habría que valorar si a la larga le saldrá a cuenta, en función de en qué problemas se verá metido por culpa de esas malas compañías. Claro que si se metió en política, puede estar tranquilo porque saldrá airoso de cualquier lío y no le pasará nada, jajaja
Un abrazo.
Excelente corto Josep, has ido dejando todas las claves para que podamos armar el cesto,... el cesto de cada uno. Porqué en esto de la vida, cada uno tiene una vara de medir. Un fuerte abrazo!
ResponderEliminarMuchas gracias, amigo del Norte.
EliminarMe alegro que te haya gustado. Muchas veces en la brevedad hay que leer entre líneas, y cada uno puede aplicarle la lectura que prefiera.
Un abrazo.
Es muy duro nacer pobre, pero cada uno tenemos nuestro destino , de todas formas, se puede ser libre de euros pero rico de sentimientos y eso es lo mas importante
ResponderEliminarExcelente micro, y aunque no hayas ganado allá, aquí has ganado, ante tus lectores, y eso es más bonito.
Besos.
Hola María!
EliminarEfectivamente, debe ser muy duro nacer en la pobreza, si poder vislumbrar qués será de nuestra vida. El lugar y ambiente en el que uno nace, pueden condicionar la forma de vida futura, si bien deberían conservarse los principios morales por delante de la riqueza.
Me alegro que te haya gustado este micro. Ya me considero un ganador solo por recibir vuestras amables críticas.
Besos.
Un micro que dice que para salir de rico hay que hacer cosas deshonestas. Se deja entrever que es algo que no es lícito y no siguió el consejo de su madre. En cuanto a los concursos ni se sabe , ni quien lee o quien clasifica. Yo por lo que tengo costumbre de oír los lunes uno de la rádio, los elegidos impactan mucho y dejan una frase para el siguiente y es el que participo pero nunca se sabe quien los lee, o que fallos se pueda hacer. Un abrazo
ResponderEliminarEl problema aparecer cuando uno quiere hacerse rico sin medios honrados a su alcance. Hacerse rico de la noche a la mañana, sin que medie la lotería, es prácticamente imposible. Es, entonces, cuando la tentación para recurrir a medios ilícitos entra en escena.
EliminarY en cuanto a los concursos, supongo que hay de todo, como en la Viña el Señor.
Un abrazo.
Siempre he considerado que la Verdad está muy sobrevalorada, de hecho la mentira siempre es más aconsejable si así se evita el dolor. El protagonista utilizó una "media verdad" que era lo que sus padres querían escuchar, ¿por qué no? Estupendo micro, Josep.
ResponderEliminarLa mentira evita tener que hacer frente a explicaciones incómodas y a la crítica del prójimo. Al protagonista le interesa hacer feliz a sus padres, que se sientan orgullosos de él, y si para ello tiene que recurrir a la mentira, pues nada, se miente y ya está. Podríamos considerarla una mentira piadosa.
EliminarUn abrazo.
El chico se buscó la vida y cree que medró más que si se hubiera buscado buenas compañías como le aconsejó su madre. Habilidades tuvo y ahora tiene los bolsillos llenos, la boca llena de mentiras y quizás no tenga ni conciencia ni dignidad. El dinero y el progreso dan felicidad, pero no todo vale.
ResponderEliminarBuenísimo tu micro, Josep Mª, qué lástima que no resultara ganador porque bien lo merecías.
Un beso
Podríamos plantearnos aquello de si el fin justifica los medios. Par el protagonista sin duda fue así. Buscó salir de la penuria y lo consiguió. No sabemos si al principio sintió reparos por lo que tenía que hacer, pero seguro que luego domeñó su conciencia a su gusto.
EliminarMuchas gracias, Chelo, por las condolencias, jajaja.
Un beso.
Hola Josep
ResponderEliminarSencillo pero con mucha carga de contenido.
El que se quiere hacer rico de prisa o tiene mucha suerte o pasa por más de un aro.
Saludos
Hola Paola!!
EliminarTe agradezco tu paso por aquí y que hayas dejado tu huella.
Un abrazo.
Jajaja. Los denostados políticos! Pero se lo tienen bien merecido. Si no, que hubieran elegido un trabajo más honrado, jeje
ResponderEliminarUn abrazo.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEstupendo relato corto pero enjundioso.
ResponderEliminarDeja claro que en una sociedad corrupta como en la que nos ha tocado vivir, el trabajo honrado no nos hará ricos y que es mejor tirar por el camino menos correcto.
Lo que no me queda claro es si el muchacho terminó rodeado de delincuentes o se dedicó a la política. Ja,ja.
Un abrazo.
Jajaja. Eso, querido Francisco, es secreto de sumario. El joven se buscó la vida como pudo. Y ya se sabe, las oportunidades para hacerse rico en relativamente poco tiempo solo se encuentran en ámbitos o ambientes "turbios", en donde la ética brilla por su ausencia.
EliminarMuchas gracias por tu comentario.
Un abrazo totalmente desinteresado y legal.
Siempre he pensado que quien es completamente honrado nunca podrá amasar una gran fortuna, para tener influencia y poder es necesario pisar muchos cuellos. Tu protagonista creo que es buena muestra de ello. Si algún multimillonario lee esto espero que sepa perdonarme si resulta ser la excepción que confirma la regla.
ResponderEliminarGenial, micro. Te deseo mucha suerte en el concurso.
Besos.
Salvo honrosísimas excepciones, esa es la regla, Paloma. Nadie se hace millonario de la noche a la mañana con el sudor de su frente. En todo caso, con el sudor (y la sangre) de frentes ajenas.
EliminarY no te preocupes, no creo que ningún multimillonario se pasee por estos lares, jajaja
Muchas gracias y un abrazo.
Hola, Josep, he leído tu microrrelato, y sinceramente, me parece muy bueno.
ResponderEliminarNarrativa sencilla, muy fácil de leer, que llega, con ambientación humilde y emotiva, para ganarse al lector. El giro argumental ya llega en el tercer párrafo, impactando con fuerza, dejando entre líneas razones y detalles, para hacerlo imaginar y participar.
El cuarto párrafo es tan escueto como decisivo, como en los grandes microrrelatos, cerrando la historia pero abriendo la mente del lector, obligándolo a imaginar el resto, invitándolo a reflexionar. Excelente.
En mi opinión, me parece un micro bastante trabajado, con una trama interesante y actual. Quizás en ese concurso te penalizaron por alguna falta gramatical o algo, es lo único que se me ocurre, como en "muy pocas, sino nulas", que quizás sería "muy pocas, si no nulas", que alguno en eso es tajante y resta puntos, cosa con la que no estoy muy de acuerdo, pero bueno. Quién esté libre de faltas, que tire la primera piedra. Yo tengo a raudales, y cada vez que reviso alguna de mis novelas saco alguna, imagina; y aún sigo teniendo alguna duda, no creas.
Muchas gracias, Josep, por un relato tan peculiar, e independientemente del concurso, yo te doy una nota altísima. No he sido nunca parte de un jurado de concursos, ni pienso serlo, me sería muy ingrato destruir sueños de la gente.
Un saludo cordial, a seguir escribiendo, a seguir ilusionándose, a seguir ilusionando a los demás, y buena lectura.
Muchísimas gracias, J.J., por tu pormenorizado análisis de este relato y por tu crítica tan positiva.
EliminarDebo entonar el mea culpa por el gazapo gramatical que mencionas. No es la primera vez que tropiezo con el dichoso "sino", a pesar de conocer su uso. "No me gusta el rojo sino el verde" (en lugar de) pero, no sé porqué, a veces caigo en la confusión, seguramente por no reparar en ello.
No sé si esto tuvo algo que ver para que me descalificaran pero creo que no. En este concurso hay un primer expurgo, tras el cual quedan 10 relatos finalistas, los cuales pasan a ser evaluados por un segundo jurado formado por prestigiosas profesionales del mundo de las letras. Supongo, por lo tanto, que es en esa segunda fase donde se aplica un grado de exigencia mucho mayor. Pero, en fin, quién sabe. Sin pretender hacer un ejercicio de falsa humildad, seguramente los 10 relatos finalistas fueran de mayor calidad que el mío. A fin de cuentas, se presentaron 1948 relatos de todo el mundo. Casi nada.
Muchas gracias de nuevo por tus elogios y ánimos.
Un abrazo.